The phantom lady.

Esta es la historia de una mujer que creía que las canciones de amor eran de verdad, y que en algún lugar mágico su amado la esperaba para hacerla sentir real.

Eso soñaba día y noche en su pequeña casa en el campo, soñaba con que alguien tomaba su mano al caminar por la orilla del rió, sonaba que alguien la abrazaba al ver el amanecer, soñaba que alguien le ayudaba a contar estrellas por las noches… ella solo soñaba y esperaba a ese ser que había sido creado únicamente para ella, ese, si ese, del cual hablan las canciones de amor, ese del que le platicaban los grandes autores en los libros, ese ser humano que, en alguna parte del mundo en ese instante esperaba y soñaba con la misma intensidad con la que lo hacia ella …

Los años pasaban y su inquietud crecía, creyó encontrarlo varias veces, pero el vacío que sentía no la abandonaba… así que un día decidió irse a la cuidad que nunca Duerme pues solo allí, pensaba ella, dejaría de sonar y empezaría a vivir. A vivir una nueva y completa vida al lado de su amado… ya no tendría que imaginar que el la tomaba de la mano al caminar por el río, no ya no, porque allí en esa cuidad ella lo encontraría, no seria un sueño mas, si no que seria una dulce realidad, seria de carne y hueso, tendría un nombre una cara una silueta, en fin su amado seria por fin real…

Fue así que tomo su maleta vieja y amarilla y empaco en ella solo su corazón y su alma. Se dirigió presurosa e ilusionada a la gran cuidad que nunca duerme, pero cual seria su sorpresa que al llegar las luces de la cuidad estaban apagadas, todo estaba en silencio, la cuidad dormía!!! … y así siguió contando estrellas ella sola, siguió caminando a la orilla del río sola, estaba sola y triste y pensó regresar al campo, pero en ese momento pensó que al encenderse las luces su suerte cambiaria y espero y soñó con la mañana, soñó con la luz y el calor que sol le proporcionaría y durmió.

A la mañana siguiente se despertó feliz pues estaba segura que al abrir los ojos encontraría señas de lo que tanto había soñado y esperado, pero no paso mucho tiempo sin que se diera cuenta que las luces que hoy la iluminaban no eran mas que luces de neon , luces artificiales. Busco el sol que solía acariciarla todas las mañana en su pequeña casa, pero no lo pudo encontrar puesto que en todo el firmamento no se veía mas, que un humo negro y espeso.

El aire le faltaba, empezó a sentir que moría y así nomás las luces de la cuidad que nunca duerme se la tragaron… desapareció, así nomás como si nada…

En el viejo pueblo ya nadie se acuerda de su nombre, pero en los campos se cuentan historias de una mujer que sueña y espera por su amado, una mujer que viajo mas allá de las fronteras hacia la cuidad que nunca duerme, una mujer a la cual solo se le conoce como la dama fantasma…

( relato inspirado por la desesperación de la autora y la película Breakfast on Pluto)